sábado, octubre 28, 2006

Seducción Neuronal y Modificación Mental

The structure only is a game of pretense




La imagen muerta de un dialogo vivo se enfrenta con la ignorancia diaria cara a cara y, a voluntad propia de querer no saber.
El mundo pasa, los libros quedan, la indiferencia los manosea con prejuicio y desden, en medio de la noche oscura de los que beben en las plazas.
Toma un libro y quiérelo sin idolatría pagana, solo con el respeto que se le debe.
Comparte tu conocimiento con el que se resiste, de forma sabía y con amor, así vivirás los días que se te han delegado con juicio justo.


Esto es prosa de mi colección, la que pretendo publicar muy pronto.

Party for ever



Baudelaire y Blake se cagaban de la risa en todo lo creado. Mas atrás en una nube tinto, Parra les hacía sombra con una gran oreja receptora de banda ancha. Éste con un pie engarrotado tomaba apuntes excitado sobre la calle de la amargura con patronato. Los zombis labriegos se amalgamaban en la conciencia de un bar mestizo, todos de pie bebiendo cerveza.
Baudelaire se detuvo en un semáforo que dubitativamente le fregaba el panizo dando luces falsas. De ese modo y, no soportando mas, saltó sobre la calle esquiando sobre sus propios improperios y arrastrando a Blake sobre la azotea incendiada del hotel Lauzun.
El jolgorio fue desmedido por el acto malabarístico en medio del cielo de rameras, que batían las manos bocas y culos con un frenesí poético y grotesco.
Manet y Delacroix tomaban de un manuscrito anotaciones matemáticas de gran calado. Diderot mordía su monóculo con el ojo de la duda y, unidos a Poe se reían con los espíritus epicúreos, del gran desorden reinante de aquella dedocracia fraudulenta donde, el que menos deprecaba, deprecaba un buque cargado de coca.
En las latas de basura del callejón aledaño se cocía al sol un menjurje de olores paridos en la era del gentleman romanticista individualista.
Blake hacía una fuerza hercúlea por no terminar sin fe en la conducta del hombre, tal esfuerzo terminó con sus sesos regados en los muros corruptos del hotel Lauzun.
Parra salvó jabonado de no recibir tan extrañas esquirlas en sus ojitos de pena. El silencio fue despótico y lo inundó todo por un gran rato. Una alondra se bebió al gran tigre bajo el espanto de la noche puta.
Sus visiones interiores quedaron suspendidas en graffítis vulgares que ni los imberbes los entendían.
Entre libertad y ocio, Baudelaire fecundó vástagos salidos de las profundidades más oscuras de los días de jarana prolífica. De un largo Agosto en París, solo quedó cenizas y un millar de vidrios quebrados de pura maldad, sobre un aburrido rostro
humano.


E.C.Flores





MASSIVE ATAC
Massive assault

Orville y Wilbur, pajaritos transportaban de rebote en sus mentes ensoñadas.
Con hazaña camuflada.
Les ignoré como nunca antes mientras cargaba mi galil con un hambre de balas negras, cada una con un nombre diferente en su tinta.
De lejos un misil aire-aire con cabeza buscadora. Silbando, cantando bajo la lluvia, arremetió feroz en busca de mi figura, que ha zarpazo limpio se movía en el inframundo de los que no tenían culpa de haber caído aquí de raja, de culo.
Mi ventana generosamente ilusa se habría de piernas a lo lejos.
La inyección de veneno entro suavemente a una potencia de tres mach y se fue a incrustar directamente a mi letrina.
Fuego, esquirla, veneno, y humo de lo más que hay, lo destruyo todo.
Volé y volé con elegancia. CNN transmitía en directo mi vuelo en cámara lenta, una y otra vez, mientras todo se dirigía a paso seguro a la real y mismísima mierda, soñé por un instante.
La idiotez en el hombre no escapa ni aun en el ultimo suspiro. El mensaje poco amigable que me fue entregado a mi puerta había sido lanzado por un avión que ahora hacía solo reconocimiento de su punto afinado. Éste, extrañeza me infundó en medio de mi sueño idiota. Su sonido me pareció espectacularmente distinto a lo esperado. Afine el poco oído que me quedaba colgando a esas horas y, cruce las piernas mientras apoyaba mi codo sobre una rodilla que a su vez erguía y sostenía mi brazo y mano. Por ultimo mi barbilla atónita se extasió en unos pocos sesos regados.
Re loco venían los días siguientes; de pronto vi la maquina salida como aparición espectral de en medio de las nubes cachondas y coloradas. Venía y venía de menos a más y, en picada. De brusco levanto el vuelo majestuosamente haciendo una “U” pomposa; la muy puta y jactanciosa maquina volante. En un punto casi se detuvo como si todo el cielo fuese para ella. Había silencio en la escena momentánea. Su esencia estética como potro salvaje se mostró, ante los flaches que venían de todas direcciones en ese momento.

Ya continuara…..


Autor yo: Enrique Cristian Morales Flores


Seudónimo: E.C.Flores.












Autor: E. C. Flores

IMAGENES